martes, 20 de agosto de 2013

DIARIO POPULAR, domingo 18 de agosto de 2013

PAPELNONOS SURGIO EN MAR DEL PLATA HACE 24 AÑOS. YA TIENE 58 GRUPOS EN EL PAIS Y ONCE EN EL EXTERIOR. EL ULTIMO, EN AUSTRALIA.

UNA RED DE ADULTOS MAYORES QUE SIGUE CRECIENDO

Mediante producciones artísticas promocionan el envejecimiento activo entre sus pares y las futuras generaciones. Invitan a revisar los conceptos de vejez que derivan de los prejuicios y resignificarlos positivamente.

POR NATALIA MUÑIZ

La Fundación Papelnonos es una red de adultos mayores que mediante actividades artísticas promocionan -y demuestran- un envejecimiento activo tanto a las generaciones futuras como a sus pares. Arman instrumentos de papel con los cuales interpretan canciones en jardines de infantes, colegios,universidades para la tercera edad, centros culturales, residencias para adultos mayores, entre otros establecimientos. También realizan obras de teatro, radioteatros, editan libros y asisten la Biblioteca Pública de Música “Astor Piazzolla”, en Mar del Plata.
La red surgió en 1989 en la Ciudad Feliz, de la mano del psicólogo Jorge Strada. En ese entonces la integraban unos quince adultos mayores. El grupo creció, la experiencia también, y la idea se fue extendiendo a otras ciudades del país y del exterior. Hoy la conforman:
* 58 grupos en Argentina
* 5 en México
* 1 en Ecuador
* 2 en Chile
* 1 en Italia
* 1 en España
* 1 en Australia
El último grupo, el de Australia, se formó el pasado 18 de julio. Su proyecto, para personas de habla hispana, está vinculado al programa Deseos por la Paz de Yoko Ono y el Arbol de los Deseos, del cual participan adultos mayores de diferentes culturas expresando su opinión y deseos por la paz.
Recientemente, la Fundación lanzó dos nuevos libros de Jorge Strada: “Contar hasta diez y otros cuentos” y “Angelo Bello y la muerte” -una continuación de la novela “Angelo Bello y la vejez” (1999), también de Strada, donde se invita a repensar la vejez-. Además, entre las últimas publicaciones, se encuentra “Los nuevos viejos...temas” (Ed. Dunken) con cuentos, relatos, reflexiones, aforismos escritos por los integrantes de Papelnonos de Mar del Plata y la Ciudad de Buenos Aires.

.- Los libros

Papelnonos Mar del Plata ya había editado “Los viejos...temas” (2001), una selección de relatos y reflexiones sobre la vejez. En esta oportunidad “Los nuevos viejos...temas” se realiza junto al grupo porteño y la impresión fue posible gracias al aporte realizado por el programa “Minuto para ganar”, de Telefé.
En el libro, compilado junto a Laura Luna, psicóloga y coordinadora de Papelnonos Capital Federal, Strada manifestó: “No sabemos lo que piensa un viejo de hoy. ‘Sabemos’ cómo son, por fuera, pero no sabemos (¿no nos interesa?) cuáles son sus pensamientos (¿piensan?), ¿qué dicen por dentro? (¿qué quisieran decir?). Tenemos algunos libros, escritos, por gente joven y medianamente adulta, que nos dicen cosas de los viejos. Vale. Pero no tenemos cosas dichas por los propios viejos. Y cuando decimos cosas, debe leerse ‘pensamientos’”.
En declaraciones a este diario, el profesional destacó que “es un interrogante qué piensan los viejos porque muchos lugares de la vejez son pensados, programados como un mercado, y se desperdicia lo que piensan, como si no tuvieran nada para decir”.
Asimismo remarcó que los adultos mayores “tienen una oportunidad interesante -por haber vivido muchas experiencias- de generar un pensamiento propio. Es necesario que el viejo sea visible (socialmente) pero no desde un mensaje estereotipado”.
En este marco, desde la Red se construye una nueva mirada sobre las personas adultas mayores que no esté ligada a representaciones sociales negativas y obsoletas sino “revisar los conceptos que derivan de las limitaciones y prejuicios y resignificarlos en un marco de desafíos y alternativas viables”, aseguró.
En tanto, afirmó que la propuesta de publicar lo que los integrantes de la Red piensan “dio origen a que otros grupos escribieran sus temas, con su idiosincrasia y realidades”. Y anunció que Papelnonos de Dolores trabaja en un libro; mientras que Papelnonos de Chaco y de San Juan se unieron para hacer lo mismo.

Recuadro: Encontrarse con nuevos caminos y alternativas

Enrique Averbuj tiene 80 años, hace ocho que integra Papelnonos de Capital Federal, y afirma que el grupo le “cambió la vida”.
Ensayan dos veces por semana, los lunes y miércoles de 10 a 12, en el Club Villa Sahores (Santo Tomé 2496, Villa del Parque) y otro día se presentan en distintas instituciones barriales y educativas.
Enrique toca una flauta traversa y un moseño, armados con papel, cartón, plasticola y muchas ganas de darse la oportunidad de vivir nuevas experiencias.
“Había enviudado dos años antes. Y junto a dos amigas vimos un anuncio de Papelnonos, fuimos a ver de qué se trataba y me dijeron ‘esto es ideal para vos’. Yo nunca me había relacionado con lo artístico. Trabajé gerenciando edificios en construcción, así que era un hombre muy rígido, estructurado, siempre vestido de traje oscuro y corbata”, recuerda.
“Mi vida empezó a cambiar tras un viaje a España que hice junto a una hija después de enviudar -destaca-. Recorrimos una parte del camino de Santiago y ahí decidí cambiar, encontrarme con otras cosas y en poco tiempo empecé con Papelnonos”.
Para el libro “Los nuevos viejos...temas”, con trabajos de los grupos de Mar del Plata y la Ciudad de Buenos Aires, Enrique escribió “Informe sobre la vejez”.
“Nunca había escrito literatura. Nos propusieron la idea y fue muy buena. Nos sorprendimos de los trabajos. Lo que escribí tiene como eje “Informe sobre la ceguera”, de José Saramago, pero con otro final”, destaca.
Respecto a cómo vive la familia su participación en Papelnonos, afirma: “Muy conformes. Tengo un ámbito de referencia, mis hijos no me están cuidando, tenemos mayor libertad porque en Papelnonos hay una red de contención muy importante, todos nos conocemos y ayudamos. Me cambió la vida. Vamos descubriendo nuevos caminos, propuestas, y ahora estamos diseñando un espectáculo para revitalizar las arrugas”, ante tanta cultura anti-age y prejuicios que aún social y erróneamente circulan.

Recuadro: La meta: generar espacios de participación

Papelnonos es un programa social, educativo y cultural orientado a:
* Promover y estimular un envejecimiento activo.
* Generar un espacio de interacción que favorezca la inclusión, la participación y la pertenencia grupal.
* Estimular la generación de proyectos vitales en las personas mayores.
* Reducir los efectos negativos de la exclusión y la soledad en los adultos mayores.
* Demostrar que “los viejos” pueden provocar una cadena de imágenes y representaciones vinculadas a la emoción, la
admiración y el respeto, desterrando imágenes (sociales) negativas.
* Generar un espacio de desarrollo personal, transformando del ocio depresivo en una oportunidad creativa y un escenario de gratificación y goce por la vida.
Para conocer más sobre Papelnonos:  www.papelnonos.org.ar y en  www.papelnonos.com 

jueves, 8 de agosto de 2013

ASÍ NOS VEN EN EL EXTERIOR

LA ONU Y LA ARGENTINA  UNIVERSIDADES DE LA TERCERA EDAD

junio 8, 2012, 12:10 am 


Universidad y Adultos Mayores, un camino de satisfacciones

El 2011 fue un año de concreciones para la Universidad de la Tercera Edad (UniTE) en la UNLZ. Por primera vez la Universidad fue sede del Encuentro Regional de Programas para Adultos Mayores, además de celebrar un importante reconocimiento de la ONU a Argentina con una Mención de Honor “por su labor realizada a favor de los adultos mayores”.
Los Adultos Mayores de la Universidad de la Tercera Edad de la UNLZ dieron la bienvenida a representantes de distintas universidades en el IV Encuentro Regional de Programas para Adultos Mayores.
Los alumnos de UNITE han tenido un año “lleno de gratificaciones y en el que se han cumplido muchos anhelos”, destacan desde la Asociación de Alumnos del Programa UniTE (AAPU); con un impulso de crecimiento estratégico y de articulación con otras instituciones de la comunidad, han sido este año protagonistas de un importante encuentro Regional de programas universitarios, además de celebrar el reconocimiento de la ONU a la Argentina por su labor realizada a favor de los adultos mayores.

UniTE, cobró vida el 14 de septiembre de 1998, bajo el lema

“la universidad es también para los Mayores”.

Apenas dos años después, el proyecto se consolidaba en la Facultad de Ciencias Sociales de la UNLZ. En 2001, por resolución del Consejo Académico, el proyecto dio lugar al  Programa UniTE –
Universidad de la Tercera Edad-.
 Diez años después, aquellos que dieron impulso al programa no pueden más que manifestar “orgullo y satisfacción” por los logros alcanzados no sólo a nivel local, sino en el ámbito nacional e internacional, como una de las entidades pioneras, en materia de educación para adultos mayores.
Es en este marco, desde UNITE han destacado un importante reconocimiento, en la 21º Celebración Anual del Día Internacional de las Personas Mayores, que se realizó en la sede de la Organización de las Naciones Unidas, en Nueva York, en el mes de octubre y en el que la ONU reconoció a la Argentina por la labor realizada a favor de los adultos mayores.
“Argentina fue el único país premiado con una Mención de Honor por su labor realizada a favor de los adultos mayores”, señalaron desde UNITE. La Mención de Honor entregada a los representantes argentinos afirma que “la comunidad internacional abordó por primera vez la cuestión del envejecimiento mundial en las Naciones Unidas de acuerdo a la iniciativa de Argentina en 1948.
A su vez, señala que nuestro país “ha elevado la cuestión del envejecimiento con el fin de proteger a las personas mayores de la pobreza, la marginación y la discriminación. Argentina ha sido y es un líder para promover, proteger y garantizar el pleno disfrute de todos los derechos humanos y las libertades fundamentales”.
Por otra parte, aseguran que “el 2011 nos  deja la satisfacción de ver cumplidos los objetivos que nos hemos propuesto en este año, se concretó un anhelo que veníamos soñando desde que participamos en el Encuentro de Universidades en San Luis el año pasado , la Facultad de Ciencias Sociales a través del Programa UniTE organizó el IV Encuentro Regional de Programas para Adultos Mayores, que se realizó los días 3, 4 y 5 de Noviembre en la Biblioteca Central, donde junto a la gran concurrencia de alumnos locales, tuvimos el agrado de contar con delegaciones de Universidades de distintos puntos del país, con quienes compartimos las jornadas en un ambiente muy cordial, intercambiando experiencias en las variadas muestras presentadas.
Con más de 55 cursos entre anuales y cuatrimestrales, el Programa se convirtió en el más importante de la educación para la tercera edad a nivel nacional, el decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la UNLZ, Santiago Aragón, destacó que el programa UniTE es “uno de los que mayor orgullo y satisfacciones nos brinda, porque da cuenta de la relación con la comunidad con los distintos sectores de nuestro lugar”, señaló.


Argentina nos esta dando una lección de cómo trabajar correctamente en el área educativa para los mayores.
 El reconocimiento obtenido, se lo merecen.


Los Mexicanos vamos a la zaga. Ellos tienen ya 20 universidades, nosotros solo 5 (3 en el Distrito Federal Y 2 en Monterrey)
Vamos a tener un nuevo régimen, habrá que exigirles a los nuevos funcionarios que nuestra propuesta sea cumplimentada (una Universidad en cada delegación en el df, y mínimo una en cada estado)

De un abuelo Universitario
Alberto cordova cayeros

“Después de haberte graduado en la escuela de la vida, que fabuloso es poder regresar a la Universidad de la
tercera edad”

martes, 6 de agosto de 2013

DIARIO POPULAR, domingo 4 de agosto de 2013
 
ESTA TENDENCIA ES DENOMINADA EL PATRON U: EL BIENESTAR SE ENCUENTRA EN LAS EDADES DE LOS EXTREMOS
REVELAN QUE SE ES MAS FELIZ A LOS 23 Y A LOS 69 AÑOS
 
Investigadores destacan que los jóvenes tienen "altas expectativas", que al no ser satisfechas afectan el bienestar en la mediana edad. En la vejez se vive con menos remordimiento y vuelven a subir los niveles de felicidad.
 
NATALIA MUÑIZ
 
¿A qué edad se es más feliz? Si uno se deja guiar por los parámetros culturales la respuesta apunta a la juventud, a los veintipico. En parte, es cierto. Pero otra etapa con elevados niveles de felicidad es la vejez, dado que se dejan de lado remordimientos por las metas no alcanzadas y se aprende a disfrutar de lo cotidiano. A este fenómeno, los investigadores lo denominan patrón U, porque los niveles de bienestar aumentan en las edades de los extremos.
Un estudio realizado por el Centro para el Desempeño Económico de la Escuela de Economía y Ciencia Política de Londres reveló que las personas somos más felices a los 23 y 69 años. Mientras, a mediados de los cincuenta se atraviesa por un momento de desilusión por los proyectos no logrados.
El documento se titula "Las aspiraciones no satisfechas como una explicación de la edad en forma de U en el bienestar humano", presentado recientemente por el investigador Hannes Schwandt. Del estudio participaron 23.161 personas de entre 17 y 85 años.
La investigación sigue la línea de otros estudios que destacan que si bien después de los treinta y pico las expectativas personales caen y siguen disminuyendo paulatinamente, con los años se aprende a manejar la decepción y el nivel de bienestar aumenta de nuevo al rondar los sesenta.
Al respecto, Schwandt manifestó: "Algunas teorías asumieron que la forma de U es impulsada por las expectativas no satisfechas que afectan negativamente el bienestar de las personas en la mediana edad, que son abandonadas y experimentadas con menos remordimiento en la vejez. Los datos aquí apoyan dicha afirmación".
"Los jóvenes tienen altas aspiraciones que son posteriormente insatisfechas. Y su satisfacción con la vida disminuye con el edad, siempre y cuando las expectativas se mantengan altas y no cumplidas", destacó el investigador.
Sin embargo afirmó que "las aspiraciones son abandonadas y las expectativas se alinean con el bienestar actual a finales de los cincuenta años. Esta es la época en la que el bienestar comienza a subir de nuevo", y una de las explicaciones es que los mayores "aprenden a sentir menos remordimiento" por las metas no alcanzadas.
Frente a este panorama, Schwandt sostuvo que difundir estas investigaciones "podrían ayudar a las personas a adaptarse a sus expectativas, optimizar las decisiones importantes en su vida y sufrir menos cuando no se cumplen las aspiraciones".
 
.- IMÁGENES POSITIVAS
 
Consultado por este diario, el Doctor en Psicología, especialista en Mediana Edad y Vejez, Ricardo Iacub, destacó que el tema de la felicidad en la tercera edad "está emergiendo bastante y las investigaciones dieron muchas sorpresas al mundo", dado que por estereotipos negativos y obsoletos acerca de esta etapa del curso de la vida "a veces es difícil que la gente imagine felicidad en la vejez".
Al respecto indicó que "una investigación en Harvard mostró contradicciones en la cuestión de la felicidad porque muchas veces se dice ‘estoy pasando por un buen momento’ y no lo es precisamente, sino que, por ejemplo, le va bien en los negocios pero eso le genera mayor estrés y agotamiento. Lo consideran ‘un buen momento’ porque les está yendo bien en sus ideales".
"A diferencia de la vejez, muchas veces la gente no se siente tan bien porque se pueden llegar a perder ideales, como el trabajo, tener hijos, etc., pero lo llamativo y contradictorio es que hay mayor estabilidad a nivel de las emociones positivas. Los adultos mayores buscan más directamente esta clase de emociones", afirmó.
En este marco destacó los resultados de otra investigación "realizada con un escáner para ver cómo funciona el cerebro, en la que se detectó que los jóvenes eran más recurrentes en imágenes negativas y los adultos mayores, más directos en imágenes positivas".
"Lo que se llegó a ver es que el adulto mayor tiende a manejar su cerebro con la zona más desarrollada, donde uno controla las emociones; mientras que los jóvenes manejan más la parte de las emociones descontroladas", explicó Iacub, titular de la cátedra de Psicología de la Tercera Edad y Vejez, de la Facultad de Psicología de la UBA.
 
Recuadro: INVESTIGACION EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES Y MAR DEL PLATA
 
"Así como biológicamente, al llegar a la vejez a veces hay dificultades, a nivel psicológico hay muchísimos logros", sostuvo el Doctor en Psicología, especialista en Mediana Edad y Vejez, Ricardo Iacub.
El profesional, titular de la cátedra de Psicología de la Tercera Edad y Vejez de la Facultad de Psicología de la UBA, destacó que junto a la Facultad de Psicología de la Universidad de Mar del Plata realizaron una investigación acerca de "Las emociones a lo largo del curso vital" que será publicada a fin de año.
Se midieron distintas emociones, búsqueda de sensaciones, control cognitivo, entre otros puntos, en una muestra de 600 casos cuantitativos y 200 a nivel cualitativos, de cuatro grupos de edades: los 20, 40, 60, y 80 y más años, en las ciudades de Buenos Aires y Mar del Plata.
Esta investigación "es un desafío que pocos países hicieron" y las estadísticas son similares a las obtenidas en otras regiones.
Al respecto adelantó que se observó que "las emociones más negativas surgieron por parte de los más jóvenes".
"Los adultos mayores buscan emociones positivas, las alcanzan y controlan mucho más que los jóvenes -aseguró-. Evitan emociones negativas, utilizan mecanismos de racionalización, comprensión de la realidad y es muy clásico que, ante ciertas noticias, digan ‘me tomo un tiempo’, es decir, se ponen un freno".
Iacub sostuvo que "así como biológicamente, al llegar a la vejez a veces hay dificultades, a nivel psicológico hay muchísimos logros, y por eso nuestra investigación tiene que ver con la Psicología Positiva y el envejecimiento positivo".
También señaló que "los jóvenes se enfrentan a situaciones de mucha felicidad y mucha infelicidad" y que una investigación norteamericana "también da cuenta que los adultos mayores se manejan mejor, en un parámetro intermedio, de 7-8, mientras que los jóvenes pasan del 1 al 10, a veces sin escala".
 
Recuadro: UNA DE LAS CLAVES: DISFRUTAR DE LO COTIDIANO
 
El Doctor en Psicología, especialista en Mediana Edad y Vejez, Ricardo Iacub, destacó que "hoy vemos que los adultos mayores son buscadores activos de situaciones placenteras", y se lo observa en los cursos y talleres, reuniones, almuerzos, bailes, paseos y viajes en los centros de jubilados y pensionados, universidades de la tercera edad, entidades barriales, organizaciones gubernamentales y no gubernamentales.
Iacub sostuvo que "muchas veces con ciertas obligaciones, que son como imperativos, y con cierta ilusión -hablando de ilusión no como algo positivo sino como algo que nos ilusiona y a veces no sabemos muy bien hacia dónde vamos-, perdemos el disfrute de lo cotidiano. Es lo que le pasa a la gente de mediana edad, está tan loca con todo lo que tiene que hacer que disfruta poco" el día a día, situaciones que se descubren y/o recuperan en la tercera edad.